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República Dominicana.- Pese a que todavía el caso está en un limbo jurídico, una representación de organizaciones sociales, religiosas y culturales de Los Alcarrizos, limpiaban este domingo el terreno donde hace más de dos años se vieron obligados a improvisar un cementerio, en el sector La Piña.
La comunidad demanda que el presidente Luis Abinader declare dichas tierras de utilidad pública y que se les de las condiciones propias de un campo santo, que llevaría el nombre de Lourdes Hernández, por ser la primera persona allí sepultada.
El 17 enero del 2018 comenzó este lugar a ser usado como cementerio improvisado. A 2 años y casi nueve meses de literalmente enterrar allí el primer cadáver, después de un peregrinaje por otros campos santos que al momento estaban llenos, la maleza propia del abandono, los ahoga, lo que preocupa a los hombres y mujeres que viven en la comunidad La Piña, en el municipio Los Alcarrizos.
“Necesitamos que el Presidente declare estas tierras de utilidad pública, para que la gente se sienta segura cuando muera un familiar, que sepa donde lo va a enterrar sin problemas y a un bajo costo”, dijo Auris Almonte, presidente de la Junta de Vecinos del sector La Piña.
Aunque este espacio está en un proceso judicial, sigue acogiendo a los muertos de la comunidad. Mientras, los vivos que pueden contar la situación que los llevó a improvisar el cementerio, reiteran a las autoridades el cese de la Litis.
“Necesitamos que se decida que van a hacer con nosotros, porque esto está en un proceso en la justicia, necesitamos la intervención del Presidente”, manifestó Saturnino Germán, un comunitario de la zona.
Ante la falta de supervisión de un personal dispuesto para esos fines, el campo santo es usado por prospectos y entrenadores, que han cercado un espacio para sus prácticas deportistas.