Llevar a Cristo al mundo

Para sacarle el máximo provecho a este devocional, lea los pasajes a los que se hacen referencia.

Después de su resurrección, Cristo le preguntó tres veces a Pedro si lo amaba. Y cada vez que el discípulo respondía que sí, el Señor le decía que cuidara de sus ovejas (Jn 21.15-17). Al igual que Pedro, estamos llamados a cuidarnos los unos a los otros, amar a la Iglesia y salir “por los caminos y por los vallados” para reflejar el amor de Cristo (Lc 14.23).

Ya sea que nos ofrezcamos como voluntarios en un programa después de la escuela, nos hagamos amigos de los no creyentes en nuestro trabajo, sirvamos en una organización benéfica, o conversemos con otros mientras esperamos en fila para pagar la compra, podemos ser de bendición y glorificar a Dios.

Nuestra misión es unirnos a la visión de Cristo como un derramamiento de su amor, levantando, involucrando y apoyando a las personas que encontramos. Y así como Cristo dejó su asiento junto al Padre para salir a un mundo frío y rescatarnos, nosotros tenemos todo tipo de oportunidades para compartir el mensaje del evangelio.

PIENSE EN ESTO

• Los mandamientos de Cristo de “amar al prójimo” y de “ir… y hacer discípulos” (Mt 22.34-40; 28.18-20). ¿Cómo se complementan e incluso se enriquecen mutuamente?

Biblia en un año: 2 Reyes 24-25

Tomado de:https://www.encontacto.org/lea/devocionales-diarios