|
En audio
|
Una persona a quien admiro mucho, me hizo llegar el mensaje que incerto en esta publicacion. Cuando lo leí le prometi que lo reproduciria en lo inmediato; el mensaje me llegó rápido y lo considere util y necesario. No obstante, a leer el primer comentario que generó el mismo me di cuenta que no todos estan en la capacidad de entenderlo, pues conforme me lo enviaron; el que usaba el banco rojo de la imagen estaba pidiendo que alguien lo invitara a jugar pues no tenia amigos.
El primer comentario que se externó sobre el mensaje fue negativo en el sentido siguiente lo copio íntegro: “La vida no es así, rara vez a alguien le importa como estás o como te sientes y si preguntan es para que pedirte algo no sea tan brusco. Los niños más inteligentes se dan cuenta de eso de chiquitos, deberían enseñarles a agradecer no a mendigar.”
Quie hizo este comentario se identifica en su perfil como Abogada de la Pontificia Universidad Católica de Chile, experta en materias de migrantes y mediadora familiar, con 12 años de ejercicio de la profesión.
El mensaje que se mandaba era el siguiente: “TODAS LAS ESCUELAS DEBERÍAN TENER ESTO… Caminando por el patio de la escuela de mi hijo, note un banco pintado de rojo brillante. Le pregunté a mi hijo: “¿Es ese el único lugar para sentarse aquí?” Él dijo: “No, ese es el banco de amigos. Cuando alguien se siente solo o no tiene con quién jugar, se sienta allí y los niños les piden que jueguen”. WOOW ASOMBROSO. Luego le dije lo maravilloso que era y le pregunté si alguna vez lo había usado.. Él dijo: “Sí. Cuando era nuevo, me senté allí y alguien vino y me pidió que jugara. Me sentí feliz. Y ahora, cuando veo niños en él, les pido que jueguen conmigo. Todos lo hacemos”.
Se desprende de lo consignado por el niño que le explica al padre, que la accion ha sido bien acogida y tenia buenos resultados, sin embargo, ya vieron lo que una profesional experta en relaciones familiares egresada de una prestigiosa universidad opinó.
No descalifico su opinion como hicieron los que comentaron despues de ella, pero le cambio el objeto del llamado. Quien se siente en ese banco dice tacitamente: “Necesito Ayuda”. A los primero que debe llaamar la atencion cualquier persona sentado en ese banco son las autoridades del centro, maestros, profesionales de la conducta, etc. Una camara discretamente enfocada a ese asient (banco) alerta a estas autoridades o profesionales que acudirán a un clamor de ayuda sin palabra.
En la actualidad por el reporte del niño es efectivo el uso que se le ha dado , es muy bueno, pero lo limita; tal vez por el nivel cognitivo de los niños a quien se le oferta y el objetivo que persigue que es posiblemente incentivar la solidaridad , la empatia o la socializacion a ese nivel. No obstante, esa buena idea se le puede sacar un mayor provecho. Cuando me gradue´de psicologia clinica, abrí un centro para ayudar a los niños maltratados o abusados sexuañlmente en una comunidad del pais en donde las estadisticas reportaban que tenia un alto índice de estas violaciones. Muy poca gente acudio en busca dde los servicios ofrecidos. Un ciudadano se me acercó y me sugirio cambiar el nombre, pues al ofrecer ayuda a niños abusados sexualmente las personas aun con la situacion, no acudirian para no exponerse publicamente. El termino necesito ayuda es generico e iria el clamor en primer lugar a quien puede brindarla o canalizarla adecuadamente.
El propósito inicial se puede mantener para el nivel para el cual se consideró, pero la idxea debe prender para un propósito aun mayor, En hora buena iniciativas como esa esx el primer paso para una gran jornada.
Darío Nin