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Mi fe se somete a una sencilla Prueba.

Por Darío Nin

Siempre se ha dicho que la fe como el oro ha de ser probada. Es de ahí que en primera de Pedro 1.7, la Palabra nos dice:” para que sometida a prueba vuestra fe, mucho más preciosa que el oro, el cual aunque perecedero se prueba con fuego, sea hallada en alabanza, gloria y honra, cuando sea manifestado Jesucristo,
A veces esas exhortaciones bíblicas nos trasladan a las pruebas extremas de vernos en una enfermedad catastrófica, excluidos social o familiarmente o en la inopia absoluta, que nos coloca en la más extrema indigencia, pobreza o escases.
Eso suele suceder, pero son muchas las ocasiones que el Señor nos coloca en situaciones en las que se prueba nuestra fe, no al fuego puro, si no en situaciones sociales protocolares.

Por ejemplo, dentro de unas horas Si el Señor me da el permiso, estaré en un grupo de representante de varios países, en un taller que busca formar facilitadores para que a su vez formen otros en base al contenido discutido y aprendido, sobre la salud mental como un derecho humano o fundamental.
Los primeros temas se desarrollaron este 05 pasado, o sea, ayer y hoy continuaremos con una agenda bastante apretada.
Al amanecer del día de hoy , al pensar y enfocarme en lo Primero, me llega a la memoria recordando la jornada de ayer que, en un  grupo eminentemente cristiano, pues se trata de los países de centro América, el Caribe latino y México, nadie pidió la palabra para poner el evento en manos del Dios creador, de Nuestro Señor Jesucristo y cuando digo nadie no me excluyo.
Hoy amanecí con la inquietud y mi fe será sometida a prueba en un par de horas, veré si en estos escenarios mi fe y convicción son tan firmes, como para proclamar al Dios en quien digo creer o, por el contrario, lo negaré por omisión tres veces antes de que cante el gallo.
Mañana les cuento. Nos volveremos a ver en el camino. Hasta la próxima que Dios nos continúe bendiciendo.
Ciudad de México 07 11 2024
DANSFDMDF 07112024

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