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Por: Darío Nin
Para: SinfronterasDigital.com (APM)
Nota : al final se incluye un sencillo Test para que verifiques si estas alfabetizado emocionalmente. Te sugiero llenar.
En estos días, un informe del Instituto Dominicano de Evaluación e Investigación de la Calidad Educativa (IDEICE) nos recuerda un dato preocupante: aunque hemos hecho avances significativos en reducir el analfabetismo convencional entre 2016 y 2024, todavía persisten focos de rezago educativo que comprometen nuestro desarrollo como nación.
Celebrar los logros es justo. Pero quedarnos solo en la cifra de quienes ahora saben leer y escribir, es ignorar otro drama igual o más peligroso: el analfabetismo emocional.
Hace un año cité —y vuelvo a citar hoy— las palabras de Daniel Goleman en su obra Inteligencia Emocional:
“Durante mucho tiempo, los educadores han estado preocupados por las deficientes calificaciones de los escolares en matemáticas y lenguaje, pero ahora están comenzando a darse cuenta de que existe una carencia mucho más apremiante: el analfabetismo emocional… parece como si nos interesara mucho más su rendimiento escolar en lectura y escritura que si seguirán con vida la próxima semana.”
Hoy, esa frase cobra más vigencia que nunca. Lo vemos a diario en los titulares: riñas que terminan en tragedia, discusiones familiares que escalan hasta la violencia física, jóvenes sin habilidades para gestionar frustración, rabia o miedo. Cada hecho violento es la fotografía de un analfabeto emocional que no sabe leer ni escribir sus propias emociones.
IDEICE, que tan bien mide nuestra calidad educativa, debería dar un paso más valiente y diseñar un índice nacional de alfabetización emocional, con indicadores claros sobre cuánto sabemos —o ignoramos— acerca de manejar la ira, la ansiedad, la empatía y la convivencia pacífica.
El Ministerio de Educación, las universidades, el Defensor del Pueblo (del cual formo parte)y el Ministerio de Salud Pública, especialmente su Departamento de Salud Mental, deben sentarse juntos a diseñar programas permanentes de educación emocional, desde las aulas hasta los barrios, desde la familia hasta los espacios de trabajo.
No podemos seguir formando ingenieros, abogados y docentes incapaces de gestionar su propia ira o su tristeza. Necesitamos graduar ciudadanos completos: alfabetizados en matemáticas y en emociones. Como nación nos urge: Medir, Reconocer la magnitud del problema, Educar y Actuar. Esta no es una moda. Es un imperativo social. Porque no basta con firmar un acta de alfabetización convencional si el corazón sigue huérfano de herramientas para dialogar, para perdonar o para pedir ayuda.
Padres, maestros, directores, ministros, rectores, legisladores: ha llegado el momento de leer nuestras emociones y escribir un nuevo capítulo en la historia educativa dominicana. ¿Nos atreveremos?
Nos volveremos a ver en el camino. Hasta la próxima . Que Dios nos continúe bendiciendo.
DANSFD01072025
Comprueba Tu alfabetización emocional da Clip en el enlace de abajo. https://docs.google.com/forms/d/e/1FAIpQLSef1Ei2XyofzHcR4qoLEAZZfeNQAtb66lF7-fSBXmZqoFBEKQ/viewform?usp=header